Natàlia Gaig pertenece a la quinta generación de una saga dedicada a la restauración en el barrio de Horta de Barcelona, de la cual ha aprendido la importancia del rigor, el buen gusto y el esfuerzo del día a día. Su fuerte vocación le permite ofrecer las recetas que ha ido aprendiendo con los años pero también las de su propia creación.
Su madre, Maria Àngels Ventura, con un bagaje profesional que empieza de muy joven, en la pastelería que los abuelos y que culmina, posteriormente, como jefe de sala del Restaurante Can Gaig de Horta con la concesión de la Estrella Michelin, constituye la mejor garantía de trato óptimo con el cliente y las mejores soluciones a sus necesidades.
Fruto de estos valores y de una pequeña ilusión, el 15 de diciembre de 2004 nace Gaig Ventura, donde cada mañana se cocinan toda la relación de platos que se ofrecen a lo largo del día. Una oferta limitada y controlada con el claro objetivo de poder dedicar a cada plato todo el cariño y atención que merece.
Los clientes tienen la satisfacción de poder ver la cocina, contemplar la elaboración de los platos y disfrutar de los aromas que cada uno de ellos desprende. Es indispensable probar los canelones trufados, los raviolis gigantes con butifarra y manzana, los chipirones rellenos, los pies de cerdo con trompetas de la muerte o el morro de bacalao con sanfaina.
Gaig Ventura ofrece también un menú diario de 9,50 euros (de martes a viernes) y uno de 12,90 euros (sábados y festivos).
Además, los domingos y festivos se puede encargar paella de marisco o de arroz negro para llevar, una de las mejores soluciones para olvidarse de cocinar, chuparse los dedos y quedar bien con los compromisos.